Peten
Peten es el departamento más grande de Guatemala, con una extensión territorial de 35,854 kilómetros cuadrados. La isla de ciudad de Flores, es la sede de la cabecera departamental y punto de partida hacia los diferentes atractivos turísticos.
Posee un inigualable valor histórico por su riqueza arqueológica, su fauna y su reserva de la biósfera. Sus Importantes sitios arqueológicos hacen de esta región la más importante del Mundo Maya.
Aquí nacen las leyendas de una de las culturas más sorprendentes del mundo. Sus fascinantes sitios arqueológicos están rodeados de selva, entre ellos el Parque Nacional Tikal, que fue declarado “Patrimonio Natural y Cultural de la Humanidad” por la UNESCO, en 1979. También se encuentran Yaxhá, Ceibal, Aguateca, San Bartolo y El Mirador, en donde se ubica, por el tamaño de su base, la pirámide más grande del Mundo Maya. Otro sitio de interés es Uaxactún, que tuvo un observatorio astrológico en uno de los edificios más importantes del área. Estos lugares fueron el escenario del desarrollo de la Civilización Maya.
Ciudad Flores cuenta con un aeropuerto internacional, “Mundo Maya”, así como una terminal de autobuses y empresas independientes de minibuses colectivos, expresos, taxis y mototaxis.
La isla de Flores está situado el lago Petén Itzá, que es el segundo más grande de Guatemala. Cerca se encuentra el parque natural y zoológico de Petencito, así como El Mirador del rey Kanek.
Para visitar estos lugares y las playas del lago, hay servicio de lanchas de motor acondicionadas para el turismo.
Cerca de Flores está la ciudad de Santa Elena, en donde se encuentra las grutas de Actún Kan y la mayor parte del comercio de la región.
La región de Petén es como un museo arqueológico maya, por su gran cantidad de sitios esparcidos en la selva, que datan desde el período pre-clásico, clásico y post-clásico de esta gran civilización.
.Adicionalmente, cuenta con otros atractivos para el turismo como: balnearios en ríos, playas, canopy, parques acuáticos, reservas naturales, costumbres y tradiciones.
Petén, por sus reservas naturales, es reconocido como el pulmón de la región, al servir de refugio y albergue a cientos de especies animales y vegetales. Esta riqueza y diversidad forestal, permite el turismo de aventura, la observación de aves y el ecoturismo.